Diseño:

   
  la hiper mega
  hIsToRiS De tErRor http://rayaleo600.es.tl/aqui%20la%20url%20de%20la%20seccion
 

UNAS DE LAS MEJORES LEYENDAS URBANAS


Lur (Barcelona. España)
Abraham Lincoln y J. F. Kennedy ¿algo más que políticos?
A ver, pídele a un profesor de Historia que te explique esto (A ver si puede):

Abraham Lincoln fué elegido al congreso en 1846.
John F. Kennedy fué elegido al congreso en 1946 .

Abraham Lincoln fué elegido Presidente en 1860.
John F. Kennedy fué elegido Presidente en 1960 .

Ambos estuvieron muy interesados en mejorar los derechos civiles.
Las esposas de ambos perdieron hijos cuando todavía estaban en la Casa Blanca.
Ambos Presidentes fueron asesinados en un Viernes.
A ambos presidentes les dispararon en la cabeza.

Aquí es donde se pone un poco misteriosa la cosa:
La secretaria de Lincoln era de apellido Kennedy,
y la secretaria de Kennedy era de apellido Lincoln.

Ambos fueron asesinados por sureños,
y ambos fueron reemplazados por sureños con el mismo apellido: Johnson.
Andrew Johnson, quien reemplazó a Lincoln, nació en 1808.
Lyndon Johnson, quien reemplazó a Kennedy, nació en 1908  .

John Wilkes Booth, quien asesinó a Lincoln, nació en 1839.
Lee Harvey Oswald, quien asesinó a Kennedy, nació en 1939 .
Ambos asesinos usaban y se les conocía por sus 3 nombres, algo no muy practicado en la cultura norteamericana.
La suma de las letras de ambos nombres te dan el mismo número: 15.

Ahora es cuando debes agarrarte de tu silla:
A Lincoln le dispararon adentro de un teatro llamado 'Ford'
A Kennedy le dispararon adentro de un coche 'Lincoln', hecho por la compañía 'Ford'
Booth y Oswald fueron asesinados antes de ir a juicio.

Y para terminar de hacerlo más misterioso
Una semana antes que lo mataran, Lincoln estuvo en Monroe, Maryland
y una semana antes que lo mataran, Kennedy estuvo con Marilyn Monroe.

 



Lucía (Huelva. España)
¡Hola equipo! Soy una onubense que ya ha votado otras veces, pero como la página es tan buena puedes votar todas las veces que quieras porque no te puedes cansar de leer historias. Y hablando de este tema:
Es increíble la cantidad de coincidencias que hay entre estos 2 ex presidentes de EE.UU. y tiene razón.... ¿cómo podría explicarte esto un profesor de historia? ¿Cómo pueden tener tantas cosas en común estos personajes? Felicito al que escribió esto puesto que es un texto muy bueno.
¡¡¡Saludos equipo!!!
BSS: LUCIA (Huelva)

Felipe Vargas
Esto realmente es notable, 10 puntos.

Vall9Mar
Le doy 4 estrellas.

Jake (Monterrey, México)
Esta leyenda está súper. Le mando un caluroso saludo al que la escribió y espero que vea mi comentario porque esta leyenda está para caerte de la silla.

Nota de ROBERT :
La mandó Lur pero no la escribió ella, es un e-mail que corre por internet.

ll ggg
Es muy buena, le damos un 10.

Ali Villarreal (Cohuila. México)
Me fascinó esta leyenda, le doy un 10. Simplemente te preguntas al leerla "¡Dios ¿qué pasó aquí?".

Manolo
11. El número de la Tercera Guerra Mundial
¿Suena todo esto un poco a coincidencia?... Aquí va:

La fecha del ataque: 9/11 (9 + 1 + 1 = 11)

De septiembre el 11 es el 254vo día del año: 2 + 5 + 4 = 11

Después del 11 de Septiembre hay 111 días hasta el final del año.

119 es el código de área de Iraq/Iran: 1 + 1 + 9 = 11

Torres gemelas - al mirarlas parado de lado a lado, parecían el número 11

El primer avión en golpear las torres era el vuelo 11

El Estado de Nueva York, es el Estado 11 de USA

Suma las letras de New York City - 11 Letras

Afghanistán - 11 Letras

El Pentágono - 11 Letras

Ramzi Yousef - 11 Letras (el capullo que puso las bombas en el WTC en 1993).

Vuelo 11 - 92 a bordo (9 + 2 = 11)

Vuelo 77 - 65 a bordo (6 + 5 = 11)

FIN.

 



Leonardo Mendoza
Pongan más leyendas de números. Muy buena.

Jake (Monterrey. México)
Esta leyenda está súper padre ya que me encanta este tipo de cosas, y te doy mi voto.

ll ggg
Yo también te doy los 10.

El Puma
Bueno, yo no te doy 10, sino 11. Saludos

Patty Ruiz
Está súper esto de los números del 9/11, ¿será cosa del destino o los terroristas pensaron en todos estos numeros fríamente...?

Naomi (Monterrey, N.L. México)
Me encantó, hasta me dio escalofrío.  ¿Sería mera concidencia o no?

Noe (Monterrey. México)

Son Números, nosotros mismos buscamos que el resultado dé 11, hay infinidad de números en todo lo que pasó en torno al 9/11 que sería imposible que sumando, restando, multiplicando, dividiendo o como quieran el resultado sea 11. Cosas de gente paranoica que le quiere dar otro sentido a simples números.
 

Jessica (Barcelona. España)
La chica de la curva
Me llamo Jéssica y también soy webmaster aficionada y adicta a las historias de terror.
Como aportación personal a ésta fantástica web, les voy a contar una historia local, que es muy conocida aquí, en Barcelona (España).

Cuentan que esto sucedió una noche de niebla espesa, en las curvas de Garraf , una sucesión de curvas cerradas y muy peligrosas, hace muchos años, mucho antes de que se construyera la autopista que ahora cruza las entrañas de la montaña de Garraf.

Era noche cerrada, caía una lluvia suave pero ininterrumpida y la niebla cubría la noche con su manto blanquecino, impidiendo ver más allá de 15 metros.

Un hombre iba conduciendo su coche por las curvas, deseoso de llegar a su casa y reencontrarse con su mujer y sus dos hijas después de un largo fin de semana de trabajo.

En una de las curvas del camino, vió a una autoestopista, una joven rubia, demacrada y pálida, empapada por la lluvia, con un largo vestido blanco desgarrado y sucio de barro . Este hombre se apiadó de la joven y, pisando los frenos, decidió llevarla consigo y acercarla hasta el pueblo más cercano.

Durante gran parte del trayecto, el hombre y la joven fueron hablando de cosas triviales, cuando, en un momento dado, antes de llegar a una de las curvas más cerradas y peligrosas de las cuestas, la joven le avisa de que reduzca la velocidad hasta casi detenerse y que pase muy poco a poco.

El hombre lo hace, y comprueba, asustado, que, de no haber sido advertido por ella del peligro, probablemente se hubiera despeñado por barranco con el coche. Le da las gracias, agradecido por haberle salvado la vida, a lo que la joven contesta:

- No me lo agradezcas, es mi misión; en esa curva me maté yo hace más de 25 años, en una noche como ésta...

Y después de pronunciar éstas palabras, desapareció, dejando como única prueba de su espectral aparición, el asiento húmedo del acompañante por sus ropas mojadas...
 

Espero que ésta historia os haya gustado.
  NOTA DE ROBERT
Nuestro amigo portugués Luís Gomes nos ha enviado una dirección donde puede verse reproducida una cinta de este hecho sucedido en Portugal. Os animo a verla aunque no entendais el idioma. Al principio puede resultar larga, pero vale la pena llegar al final. Si no la podeis ver por conexión, entrad en otra ocasión (a mí no me funcionó la primera vez pero otro día sí pude verla entera)
ver Reproducción -ficción- Película La Chica de la Curva

 



Beatriz (Barcelona. España)
Yo conocía también esa historia, pero yo la conozco contada de diferente manera. Que la autoestopista le dice al hombre, cuando llegan a la curva, “aquí me maté yo”, el hombre se pone nervioso al mirar para atrás, ve que ya no está la chica y en ese momento pierde el control del coche y se cae por el barranco, y se dice que la chica como es un alma en pena hace eso para que la gente sepa lo que ella sufrió cuando se cayó por el precipicio.

Yo misma, he pasado por esas curvas, pero de día y no ha pasado nada, pero conozco a gente que ha pasado de noche y dicen que pasan cosas muy raras, a mí personalmente me da mucho respeto pasar por ahí de noche.

Gracias por escucharme, y perdona Jessica si te he fastidiado la historia.
 

Nota de ROBERT a Beatriz :
No temas por haber fastidiado su historia. En realidad por eso es una leyenda. Si la persona se matara cayendo del barranco, no podría contarlo. Existen múltiples variaciones de esta misma leyenda en todos los países. El otro día, sin ir más lejos, mi madre le contó a mi hijo esta misma leyenda en una curva que llevaba a la costa valenciana (yo me quedé atónita) y recuerdo con qué seriedad le decía que era real. La chica se aparecía en los coches, al lado del conductor, y les decía "no corras, en esta curva me maté yo". El conductor ponía atención para no estrellarse y la chica desaparecía del asiento del copiloto.

Gabriela Herrera
¡Está súper chida!

Rucilam
Una leyenda urbana estupenda, creo que es una de las más populares aquí en España; aunque yo la había escuchado como la resume Beatriz.

Celia (12 años)
La leyenda es estupenda y si te sabes más deberías contarlas, Beatriz y tú deberíais trabajar juntan contando las leyendas.

José Antonio
Muy buena leyenda y muy conocida en todo el mundo. Con respecto al vídeo está magnifico, una pregunta Kruela ¿Crees que sea cierto el vídeo o está montado?, se ve real pero tú sabes que en estos asuntos el primer paso es ser escéptico. Felicidades por tu página, está muy padre.

Nota de ROBERT
El vídeo es una filmación de ficción, se han basado en hechos reales, en lo que según parece ocurrió, pero lo han filmado unos amigos para contar la historia.

Slayer (Uruapan, Michoacan. México)
Soy de Uruapan Michoacan y está de poca esta historia, y el vídeo está de miedo, se los recomiendo. Por aquí les estaré contando unas historias de las cuales yo soy protagonista.

Pedro (Parras, Coahuila. México) 

Pues la verdad, yo no creo para nada en esta historia porque la verdad... lo que yo no veo, no creo.
 

 

Angel L. Blanco
Gota a gota
Un saludo a todos los lectores de esta página y muy en especial a ROBERT pues gracias a el podemos leer relatos de todas las partes del mundo y conocer historias realmente fascinantes. Yo os escribo desde España, y mi intención es contaros una de las leyendas urbanas que desde niño mas me llamaron la atención.

Todo comenzó a mediados de los años 60 en las afueras de Valencia en un pueblo llamado La Eliana, este pueblo como tantos otros de la franja mediterránea se dedicaba principalmente a la agricultura y más en especial a los cítricos, era un pueblo pequeño en el que como máximo habría unos quinientos habitantes y todos ellos se concentraban en las pocas calles que rodeaban a la plaza del pueblo, todos salvo la familia González que residían en las afueras del pueblo en una gran mansión que antiguamente pertenecía a los Duques de Flores. Era una casa preciosa, de altos techos e innumerables salones y habitaciones, todos ellos decorados con gran gusto.

La mansión también constaba de unos espaciosos jardines en los que era fácil perderse y todo ello rodeado por un muro por el que solo se podía acceder mediante una gigantesca puerta de acero forjado.

Allí vivía la familia González cuyo cabeza de familia era Joaquín González y se dedicaba por entero a sus negocios empresariales, su esposa era la Sra. Patricia González una distinguida dama de la aristocracia valenciana que además de ser una preciosidad era la madre de cuatro lindas criaturas. Los pequeños de la casa iban desde los cuatro meses que tenia José hasta los cinco años que tenia la mayor Nancy, que era igual de bonita que su madre. Era lo que podríamos resumir como una familia feliz.

La familia González tenia un servicio que estaba compuesto de una niñera, dos cocineras y otras dos mujeres que se dedicaban a la limpieza de la casa y las faenas del hogar, sin contar a los hombres que se encargaban del cuidado del jsrdín y de los pequeños arreglos que pudiese necesitar la casa por el paso del tiempo.

Mantenían una relación muy cordial con sus vecinos del pueblo pues en las fiestas siempre hacían una fuerte aportación de dinero que engrandecía los festejos.

En apariencia todo funcionaba de maravilla, dentro de pocos días llegarían las fiestas de Navidad y la familia estaba realizando todos los preparativos para que fuesen unas Navidades inolvidables.

Pasaron los días y por fin llegó la Navidad; toda la casa se llenó de colorido y en el jardín adornaron el abeto que tenían con giraldas y bolas de colores, los niños estaban encantados, todo eran risas y diversión y muy pronto llegarían los Reyes Magos cargados de regalos para ellos.

Llegó el día de Noche Vieja y los señores González se preparaban para asistir a una fiesta que daban en el pueblo, en la que iría a tocar una orquesta y habría baile hasta bien entrada la noche. Esa noche todo el servicio tenía fiesta menos la niñera ya que ella se tenía que quedar a cargo de los pequeños.

Una vez los señores González se hubieron marchado la joven niñera se dispuso a dar de cenar a lo críos y acostarlos. Los más pequeños no tardaron mucho en dormirse pero la preciosa Nancy y su hermana Sandra le pidieron a la joven que les contara un cuento para poder dormir, esta les contó un par de historias de su invención en las que aparecían príncipes y princesas y las niñas no tardaron en caer rendidas en brazos de Morfeo.

La muchacha ya algo agotada las arropó y con mucho sigilo salió de la habitación cerrando tras de sí la puerta.

Eran prácticamente las diez de la noche y se decidió a ir a comer algo a la cocina, la gran mansión se encontraba en un silencio sepulcral, tanto que a veces le recorría un pequeño escalofrío por el cuerpo.

Después de prepararse una ensalada y un pequeño bocadillo de jamón y queso se dirigió al comedor donde escucharía un poco de música mientras intentaba leer un poco.

Pasaron las horas y la chica se quedó dormida en el sofá. Sobresaltada se despertó, pues estaba sonando de forma incesante el teléfono, -ring, ring...- no paraba de sonar en ese momento ella no sabía exactamente donde se encontraba tardó unos segundos en darse cuenta que estaba en la mansión de los González.

Se levantó rápidamente del sofá y cogió el teléfono que se encontraba sobre una mesilla cerca de la lámpara. Descolgó el auricular pero al otro lado de la línea no se escuchaba a nadie; ella preguntó varias veces "buenas noches casa de los González ¿hay alguien ahí?", pero nadie contestó... transcurrido un tiempo colgó el teléfono y se quedó mirándolo durante unos instantes, luego sin darle más importancia se fue a recoger los platos y el vaso que había dejado junto al sofá para llevarlos a la cocina, una vez allí los metió en la pila y cuando se disponía a limpiarlos volvió a escuchar el timbre del teléfono -ring, ring...- de nuevo salió corriendo hacia el comedor y sofocada cogió el teléfono. Tampoco esta vez se escuchó nada al otro lado, la muchacha algo preocupada preguntaba incesantemente -¿diga, diga?- pero nadie contestaba. Finalmente se volvió a cortar la comunicación.

Sari, que así se llamaba la niñera, pensó que sería un fallo de la central telefónica pues no era raro que durante esas fechas hubiese cortes telefónicos debidos al mal tiempo. No había dado dos pasos cuando de nuevo sonó el teléfono, rápidamente lo volvió a coger y de nuevo preguntó si había alguien... al otro lado de la línea pero nadie contestó, aunque esta vez escuchó algo que las otras veces no había oído, se escuchaba con claridad, tal vez con demasiada claridad, sonaba como un goteo - cloc, cloc ...- Sari volvió a preguntar - ¿buenas noches, hay alguien?- pero nadie contestó. La muchacha comenzaba a estar algo preocupada y decidió llamar a la policía del pueblo para comunicarles lo sucedido, descolgó de nuevo el teléfono y cuando se acercó el auricular a la oreja volvió a escuchar - cloc, cloc ...-. Atónita soltó el teléfono y retrocedió unos pasos... no entendía qué estaba ocurriendo. Con miedo cogió el auricular y lo colgó se dirigió al salón principal donde había otro teléfono e intentó volver a llamar desde él pero antes de que ella lo descolgase, este sonó con un timbre que ya estaba comenzando a desquiciarla -ring, ring...- Esta vez tardó más en coger el teléfono pues lo que podría sonar al otro lado la intranquilizaba; finalmente lo descolgó y se lo acercó poco a poco a la oreja como sabiendo ya de antemano lo que iba a escuchar - cloc, cloc ...- es lo que oyó. Aterrada tiró el auricular al suelo con rabia y le gritó de forma histérica al teléfono -¿quién es?, ¿qué es lo que quiere?- pero el teléfono solo contestaba - cloc, cloc ...- De nuevo lo volvió a colgar entre sollozos, pero una vez colgado éste volvió a sonar, la muchacha aterrada ya no se atrevió a descolgarlo y decidió coger a los niños e irse con ellos al pueblo en busca de sus padres y la policía, subió corriendo la escalera que llevaba al cuarto de los más pequeños mientras por toda la casa resonaba -ring, ring...-.

Abrió la habitación de los niños pero ellos no estaban en allí, sin apenas podérselo creer abrió la habitación contigua en donde dormían Nancy y Sandra y ellas tampoco se encontraban en la habitación. El pánico se apoderó de ella y comenzó a gritar enloquecida pidiendo que parase el incesante timbre del teléfono, pero éste no cesaba -ring, ring...-. cogió el teléfono que se encontraba en el pasillo y antes de dejarlo descolgado para dejar de oír su timbre volvió a escuchar el sonido de las gotas que caían - cloc, cloc ...-.

Comenzó a correr por toda la casa buscando a los niños, recorriendo cada una de las estancias mientras en su cabeza no paraba es escucharse un tétrico y a la vez incesante goteo - cloc, cloc ...-. Una por una recorrió todas las habitaciones sin éxito, los niños no aparecían por ninguna parte, sólo le quedaba mirar en el ala oeste del caserón destinado al personal que trabajaba en la casa, cogió una llave maestra para entrar en los aposentos privados de los trabajadores pero en ellos no encontró nada, entró en el baño del servicio empujando bruscamente la puerta, allí estaban.

Sus ojos desorbitados no podían creerse la escena que tenían delante.

Atónita contempló cómo las cuatro criaturas estaban dentro de la bañera vacía, apilados unos sobre otros, habían sido degollados y metidos allí. La cabeza de la pequeña Nancy sobresalía de la bañera y de su cuello emanaba un hilo de sangre que recorría el borde de la bañera y caía sobre el auricular del teléfono descolgado produciendo un incesante goteo - cloc, cloc ...-

Nunca se encontró al culpable y tuvieron que pasar muchos años para que la gente que pasaba cerca del caserón no sufriera un escalofrío al recordar los hechos.

Después de aquello la pobre Sari tuvo que tener ayuda psicológica hasta que a finales de los años setenta terminó con su vida arrojándose desde un octavo piso, dicen que por las noches cuando dormía no dejaba de escuchar las gotas de sangre que caían sobre el teléfono.

Desde entonces la casa esta deshabitada pues la familia González se mudo a la ciudad de Valencia intentando olvidar lo ocurrido y nadie quiso comprarla después de los hechos que en ella acontecieron.

Fin

Angel L. Blanco (Valencia) España.

 



Erice Mora
Esta es una gran historia, me encantó tanto que temo no poder dormir esta noche sin escuchar ese incesante goteo en la oscuridad.

Rucilam
Una leyenda muy popular, en el filme "Leyenda urbana" la mencionan, y es muy probable que inspirase "La noche de Halloween".

Nota de ROBERT :
Casualmente a mí me encantó porque la relató en el mismo lugar donde yo vivo, e incluso conozco la casa de la que habla. Siempre que pasaba por allí me daba yuyu, no me extraña que la haya situado en ese lugar

Noe Cruz
Qué buena narración. Yo no la conocía.

Ali Villarreal (Cohuila. México)
La verdad, me fascinó, ésta sí da miedo.

Kristel (Perú)
Esta historia estuvo muy bien narrada. ¡Felicidades!

Mauricio N. (Juárez, Chihuahua. México)
19/10/2006
Interesante pero hay una película, no sé si la han visto, que se llama "Cuando un extraño llama", no es igual pero sí tiene un parecido. Chéquenla, está muy bien... Y felicito a la persona que la contó.

Nydelin
13/11/2006
Qué tal. Saben, esta historia me resulta más que aterradora puesto que yo nunca la había escuchado... Al contrario de esto yo la he soñado millones de veces, desde la infancia, no sé qué decir, estoy aterrada.
 

 

Thone (Sevilla. España)
La historia del Faro de Sevilla
Hola ROBERT , aquí tienes la historia para que la publiques, me alegro de que te haya gustado:

En la ciudad de Sevilla hace tiempo un medium dijo al pueblo que el Demonio iba a inundar la ciudad y que el mar llegaría a Sevilla así que el pueblo decició construir un faro para que los barcos no chocasen.

Al tenerlo construido una familia empezó a vivir allí para cuidar el faro, la familia estaba formada por un matrimonio y sus 5 hijos.

Una noche los padres oyeron un grito que venía de la habitación de sus hijos; lo que fue sorprendente que al llegar vieron a todos sus hijos menos a la hija mayor durmiendo. La buscaron por toda la casa y no la encontraron pero al asomarse a la ventana vieron que su hija estaba en el suelo muerta pues se había tirado por la ventana.

Pasaron 2 ó 3 años del trágico accidente hasta que otra noche oyeron de nuevo un grito que provenía de nuevo de la habitación. Al entrar se encontraron a su hija pequeña esparcida en trozos literalmente por toda la habitación que estaba llena de sangre.

Después de todo lo ocurrido trataron el tema de irse de la casa del faro pero decidieron no irse y el Ayuntamiento puso una guardería en la puerta.

Según pasaban los años iban muriendo más miembros de la familia hasta que sólo quedaron el hijo mediano, Ricardo, una hija de cuyo nombre no me acuerdo y los padres.

Cuando parecía que la situación se tranquilizaba la noche de San Juan la familia estaba durmiendo cuando de repente se oyó otro grito, pero la diferencia es que esta vez el grito provenía de fuera y cuando el padre se asomó vio en la punta de la lanza del faro atravesada a su hija y la madre al no soportar ya tanto dolor se suicidó, pero muchos dicen que no fue por voluntad propia.

El padre y Ricardo se quedaron en la casa. Aun después de todo lo sucedido consideraban su hogar. Cuando Ricardo tenía 17 años entró en un coma y su padre muy apenado no se separó de él ni para comer.

Cuando una noche se fue a por un vaso de agua a la cocina y oyó a toda su familia hablando en la cocina, riéndose y hablando entonces el padre vio un cuadro en la pared de toda la familia en la cual faltaba Ricardo y se le escapó una lágrima que quedó reflejada en el cuadro.

En ese mismo momento Ricardo despertó del coma y su padre murió.

Resulta que Ricardo no estaba en el cuadro por no ser hijo nada más que de su madre.

El Faro de Sevilla es la Torre del Oro y mucha gente piensa que fue una venganza del diablo por retarle al construir el faro.

 



Susanna
Es una historia de alta credibilidad, le pongo un 8.

Arnold Ventura (Arequipa. Perú)
Waaaaaauuuuuu qué impresionante historia, saludos desde Perú - Arequipa.

Edwin Franco
05/10/2006
Waaaaaaaaaauuuuu  Excelente historia, te felicito, es muy creíble, es  digna de un maravilloso 10.




Anónimo (Lima. Perú)
La Casa Matusita
Hola ROBERT, te mando una leyenda de acá de Lima, Perú. Es súper antigua, se llama "La Casa Matusita".

Esta casa es una tienda que queda en un primer piso en el centro de Lima , la casa es de dos pisos pero al segundo piso nadie entra por temor , se dice que hace tiempo para averiguar si era cierto que pasaban cosas paranormales en la casa entró un periodista el cual se volvió loco y terminó en un sanatorio, así mismo entró un sacerdote para bendecirla y terminó matándose, por querer escapar de la casa. La historia, bueno, hay varias versiones de esa casa y la que yo conozco es:

Hace muchísimo tiempo en esa casa vivía un señor muy perverso , y con él vivían sus dos sirvientes: la cocinera y el mayordomo; el señor era muy perverso con estos sirvientes, los maltrataba, los insultaba..., los sirvientes se llenaron de odio, y un día en que el señor brindaba una cena a unos amigos los sirvientes decidieron ponerle a la cena un líquido que hiciera que los invitados y el mismo dueño de la casa se volvieran locos, y alucinaran, sólo por venganza hacia el señor.

Cuando todos estaban sentados en la mesa, la cocinera ya había servido los platos con el líquido alucinógeno en ellos, el mayodormo sirvió la cena y al salir de la habitación (comedor) cerró la puerta por fuera. Pasados unos 15 minutos escucharon gritos, insultos, platos que se rompían, murmullos, y personas completamente aterradas. Después de un largo escándalo empezó un silencio sepulcral.

Los sirvientes pensando que ya todo estaba más calmado decidieron abrir la puerta del comedor, y para su sorpresa al abrir la puerta vieron el más macabro panorama: miraban a su alrededor y veían sangre, pedazos de cuerpo, ojos, manos, órganos internos, charcos de sangre, la cara de los invitados mostraban algunas terror otras odio, cabezas cortadas , era tan feo lo que veían que los mismos sirvientes se volvieron locos y se mataron en el mismo salón donde estaban el dueño y sus invitados.

Y se dice que desde esa época se escuchan conversaciones, luego gritos, amenazas tal cual pasó la noche de la masacre, y toda persona que ahí va se vuelve loca ya que vuelve a vivir lo que un día ahí pasó.
 
 

 



La Diosa Griega (Venezuela)
Impactante, muy buena.

Vall9Mar (Lima. Perú)
Me encantó esta historia acerca de la casa Matusita, la primera historia, y suena muy bien.

Carlos Rivera
¡Esta es una de las mejores historias de casas misteriosas o con espíritus! ¡VIVA LA CASA MATUSITA! y ¡felicitaciones al que envió esta historia!

Ricardo Torres
Está muy chida, invítame para yo poder entrar.

Paul Saavedra
Sí que está buena la historia, muchas felicitaciones... M voto va para ti...
Espero nuevas historias...

Zamurinho (Caracas, Venezuela)
El Silbón
Hola robert, un saludo desde Venezuela. Tu página me parece genial por lo que me decido a escribirte por primera vez. Espero les guste.

La región de los Llanos es una extensa zona de sabana, en donde habita gente muy pintoresca que en muchos sitios aún anda a caballo y vive de la tierra y del ganado ; es una de las partes en donde las tradiciones se conservan más puras en toda Venezuela. En esta zona existen infinidad de cuentos y leyendas, pero la que a continuación describo es una de las más populares en todo el país. Existen varias versiones de ella, por lo que he tratado de conjugarlas todas en una sola historia.
 

EL SILBÓN (tradición oral)

Noche cerrada ya en el Llano. Teresa despide a su esposo Manuel quien se dispone a salir de viaje. Al mismo tiempo, Porfirio, hombre bebedor, mujeriego y apostador, observa su reloj calculando el tiempo prudencial en el cual puede acercarse sin peligro a casa de Teresa. Oportunamente, Teresa le informó que Manuel salía de viaje y éste espera la hora mientras tomaba un trago en un bar cercano al lugar de encuentro, del que es cliente asiduo. Porfirio disfruta imaginando el cuerpo desnudo de Teresa a quien le tiene el ojo puesto desde hace tiempo.

Bien entrada la noche Porfirio se despide de la gente del bar y se dirige a casa de Teresa. Casi llegando a su destino, ve una silueta entre las sábanas que se encuentran tendidas en el patio de Teresa, y se acerca pensando en llegarle de sorpresa a la mujer mientras ésta tiende la ropa. Mientras se acerca escucha un sonido, algo extraño, parece un silbido. Él se detiene para escuchar mejor. En efecto, es un silbido que sin razón aparente le produce un escalofrío que le recorre toda su columna vertebral.

Algo le dice a Porfirio que no continúe, que se devuelva, sin embargo el deseo va ganando la partida. Luego de un silencio empieza a avanzar nuevamente pero dos pasos más allá escucha el silbido más cerca acompañado de un ruido que Porfirio no identifica. Son objetos chocando entre sí, pero ¿qué tipo de objetos...? Porfirio no se atreve a avanzar más, está a punto de entrar en pánico. La lógica le dice que no existe motivo alguno para temer, pero su piel de gallina le dice lo contrario.

Escucha nuevamente: suena como... ¿huesos!? no es posible!

Sus sentidos se han agudizado ante el miedo y al observar otra vez la silueta que había notado al acercarse ve con terror que es una figura de forma humana, que en cuclillas como se encuentra sobrepasa por un palmo su propia estatura estando de pie, y que lleva a cuestas un saco a medio llenar. Porfirio no se da tiempo de más... la carrera que protagonizó de vuelta al bar es digna de un récord; y no es para menos, ya que siente (imaginación o no, no lo sabe realmente) que le están persiguiendo. Tras suyo, el perro de una casa vecina ladra con furia, pero Porfirio jura que no le ladra a él.

De regreso, el dueño del bar se preocupa enormemente por el semblante de Porfirio, quien en su palidez asemejaba a la luna que esa noche brillaba pero por su ausencia. Porfirio le cuenta al amigo lo sucedido con lujo de detalles (los que recuerda), quien al escuchar le responde: "Chico, por andar de mujeriego! a ti lo que te salió fué el Silbón! si lo único que te salvó fué el perro!".

Porfirio observa al dueño del bar algo incrédulo: "¿El Silbón? ¿quién es el Silbón?".

En respuesta el dueño del bar dice: "El silbón es un espanto de muchos que pululan la sabana, pero que tiene como distinción lo cruel. El Silbón no mata sólo del susto, mata a golpes y ahorcando a sus víctimas".

Porfirio pregunta: "Pero tú no crees en esas cosas, ¿no? esos son cuentos de vieja. ¡A mí lo que me persiguió fue otra cosa!"

A continuación el dueño del bar, a quien se le acercan otras personas interesadas por la conversación, comienza a contar:
  "Cuenta la leyenda, que hace ya mucho tiempo un hombre muy jóven despreocupadamente vivía en compañía de su esposa , cuidando del ganado y de la tierra que a su abuelo y su padre pertenecían, y silbando tonadas a toda hora (costumbre muy propia del llanero). Este hombre, como todos, tenía sus defectos los cuales no le impedían guardar respeto por su familia. Sin embargo, si ese hombre hubiese notado antes lo que sucedía a sus espaldas, ese respeto por los valores familiares se hubiese trocado por cualquier otro tipo de sentimientos adversos hacia su progenitor y su mujer: desde que se casó, el padre se iba entendiendo con su nuera , quien se sentía halagada por las atenciones del viejo.

Al pasar el tiempo, la mujer iba perdiendo interés por su suegro mientras crecía el amor hacia su marido por el sentimiento de devoción que este le profesaba, haciéndose menos frecuentes sus encuentros hasta que cesaron por completo. El orgullo del viejo al verse contínuamente rechazado fué generando sentimientos crecientes de pasión e ira hacia la mujer, a quien cada vez se le iba haciendo más difícil escurrírsele de las manos a su suegro. Llegado el momento, el viejo sin poder represar más ese instinto animal que le impuso su pasión por la nuera, la hizo objeto de una violación de la manera más violenta y humillante que su malicioso espíritu pudo haberle impulsado.

La mujer, quedó desmayada en el mismo lugar en donde se consumó tan cruel acto y en donde su esposo la encontró maltrecha y herida , aunque más en el alma que en cuerpo, lo que es dacir bastante ya. Queda claro que aquella mujer a quien él tanto quería no volvería a ser la misma. Varias veces intentó hacerla reaccionar para que le indicase quien fue capaz de hacer semejante brutalidad, sin embargo, la única respuesta de la mujer fue una lagrima corriendo por su mejilla, salida de sus ojos vacios por el dolor y la culpa.

El hombre se recriminó cualquier acto que contra su mujer hubiese cometido, y se maldijo por no haber estado con ella más continuamente... Ninguno de los peones o criadas dijo haber visto algo. Pero no importaba, ¡¡con ayuda de su padre él vengaría la desgracia de su mujer!! Tomó de inmediato su caballo y a galope se dirigió al pueblo, donde encontró a su padre apostando a las cartas, con la expresión del hombre triunfante.
- ¡Papá! ¡alguien desgració a mi mujer!
- ¿A esa regalada...!?
Esto último fue dicho con el mayor de los desdenes. El hijo tembló, sin saber si por rabia o por miedo, miedo de no saber que iba a hacer él mismo ante la respuesta que tan clara se veía venir.
- ¿Usted sabe algo papá...?
- Ella se lo buscó por regalada. Y sí le pegué, si eso me iba a preguntar...-
Lo siguiente fue un grito furioso, seguido de un fuerte golpe que el joven lleno de ira asestó con un palo a la cabeza del viejo, quien cayó al piso donde su mismo hijo, presa de la furia acabó con su vida ahorcándolo.

El hombre, ido de toda realidad se devolvió a su casa, pero sin apuro y caminando con el caballo tomado de la brida, recreando en su mente el trágico momento, odiando a su padre desde lo más profundo de su ser. En ese estado de abstracción llegó a su casa en donde se encontró con su mujer, a quien la zozobra de no saber qué estaba sucediendo le había hecho reaccionar.

- ¿Qué le hiciste?
- Lo maté, porque eso no se le hace a una dama...

Pero más había sucedido. El abuelo del hombre fue avisado de lo que pasó y llegó hasta el lugar en donde su hijo había sido muerto a manos de su nieto. De inmediato envió a sus peones a casa del asesino, ordenándoles que le trajeran a su presencia.

Tarde reaccionó el marido cuando le cogieron y amarraron, llevándole al sitio donde a su padre había ultimado. El abuelo le pegó latigazos en la espalda mientras le decía: "¡¡eso no se le hace al padre de uno!! ¡¡el papá de uno es sagrado!! ¡¡¡aprende!!!"- en las marcas que le iban pegando quedaron marcas en las que le echaron ají picante, para luego soltarlo y verlo correr. Soltaron a un perro amarrado con mucha hambre y con mal de rabia, que le alcanzó y lo mordió hasta dejarlo agonizando. Segundos antes de morir el abuelo le maldijo:
- Maldita tu alma, que lleva a cuestas la muerte de su padre y que no dejará de vagar eternamente sin conseguir el perdón! ¡¡que tu pecado sea tu condena!!"


- El hombre quien ahora es el Silbón anda penando y mata a aquellos hombres que son mujeriegos con el saco en el cual lleva los huesos de su padre y de sus otras víctimas. Quienes le han visto y han sobrevivido para contarlo aseguran que es un ser muy delgado que mide más de tres metros y el tono de su piel es rojizo. Nadie se explica por qué ha tomado esta forma, pero hay quien dice que así lo moldeó el mismo Diablo, para que su andar sea más rápido.

- Te salvó el perro Porfirio, pues a lo único que teme es al ají picante, al látigo y al perro, que fueron los que lo mataron.

Mientras esta historia contaba el dueño del bar, a Porfirio se le había pasado el susto ayudado por el alcohol y por una hermosa joven que acompañada de su marido había entrado al bar.

- ¡Puros cuentos! ¡Más aguardiente! - decía Porfirio mientras observaba descaradamente a la joven, quien le correspondía con miradas socarronas mientras su marido no se daba cuenta por estar metido en el juego.

A una seña de la joven Porfirio sale a la parte de afuera del bar bajo la mirada desaprobadora del dueño quien le advirtió:
 - ¿No tuviste suficientes problemas por esta noche Porfirio? No busques más problemas, quédate aquí hasta el amanecer.

Haciendo caso omiso Porfirio sale del local. Afuera, se encuentran Porfirio y la joven, quienes luego de provocarse mutuamante con palabras comienzan a abrazarse. Pasados unos minutos y luego de desplazarse a un rincón apartado en donde ambos ya están casi desnudos, Porfirio siente en su cabeza el contacto frío del arma del marido de la joven. En un momento de descuido, en el cual el marido iracundo la toma con la esposa infiel, Porfirio escapa a toda carrera con la ropa en sus manos, no sin sentir detonaciones y zumbidos de balas pasando cerca de él. Pero ya Porfirio se ha salido con la suya, ha tomado la suficiente distancia y muy lejos ya del lugar se detiene a tomar aire y vestirse, orgulloso de su nueva proeza.

Pero algo hace que Porfirio detenga todo pensamiento: un silbido, igual al que había escuchado hace rato ya cerca de la casa de Teresa. Porfirio queda inmóvil, mientras percibe como a pocos metros chocan objetos entre sí, que se le antojan como huesos dentro de un saco. Porfirio siente el impulso de dirigir la mirada hacia el lugar de donde viene tan escalofriante ruido. A su mente llega la imágen de un hombre muy alto  y de tez rojiza que le observa, esperando un movimiento de su parte.

La lógica de Porfirio no da crédito a esta imágen que su mente proyecta. El pánico le invade mientras voltea su mirada. Escucha un silbido que le obliga a mirar hacia arriba...

Al día siguiente es encontrado un cuerpo totalmente deformado por las mutilaciones y sin un hueso en su interior, en un recodo del camino que va hacia el pueblo. No es posible identificar a quien pertenece ese cuerpo sin efectuar algún tipo de exámenes médicos. Por un anillo que encontraron cerca del lugar se presume que es el cuerpo de Porfirio. Si es así, algunos piensan que pudo haber sido algún marido engañado de los tantos que desean ver muerto al personaje en cuestión, sin embargo, a la mayoría de los residentes del pueblo se les ve temor en sus semblantes, pero nadie quiere emitir una opinión franca de lo sucedido.

Y es que por más de cien años este tipo de muertes se han visto ocasionalmente en todo el llano...

 

 



Daniel (Toluca. México)
Es una buena leyenda, interesante y escalofriante.

Sarah Conor
Me encantó esta leyenda, está buena para jugar una broma pesada a algún amigo mujeriego....

 

Bubble
Cita con un fantasma
Hola robert!
Me gustaría explicarte una historia, leyenda,...no sabría explicarte realmente qué es.

Trata de un chico (pongámosle SERGIO) que está de marcha en la discoteca con sus amigos. En medio de todo el alboroto ve a una chica espectacular: cabellos rubios y largos, aspecto agradable (como de ser la mejor persona del mundo) y una especie de encanto al que era imposible resistirse.

Al sentirse tan atraído y después de pensarlo un buen rato decide hablar con ella. A los pocos minutos están hablando como si se conocieran de toda la vida. Pero lo que más le sorprende, es que cada minuto que pasa se siente aún más atraído. Cuando llega la hora de irse se ofrece a acompañarla a su casa, y ella no dice nada, sólo sonríe, y sonríe...

Por el camino ella tiene frío, y SERGIO no puede negarse a prestarle su chaqueta.

Cuando llegan al portal de casa de la chica (pongámosle de nombre MÓNICA), no puede aguantar más y le da el beso más tierno y sincero que se pueda imaginar. Después de esto le propone quedar para el día siguiente, y "MÓNICA" le dice que lo siente, pero que no podrá ser. Él intenta buscar mil y una explicaciones, pero ninguna le da. Lo único que dice es que ya se pondrá en contacto con él y que pase lo que pase nunca le olvidará.

Al día siguiente SERGIO va a su casa, pues le había dejado su chaqueta y quería recuperarla, aunque lo que más bien quería era un motivo para volver a ver a la chica de quien se había enamorado.
Al llamar a la puerta, le abre una mujer mayor. Y pregunta:
- ¿Está MÓNICA?
- ¿Quién dices? -le responde.
- Sí, que si está MÓNICA. Verá: es que soy un amigo suyo y ayer le presté mi chaqueta, y venía a que me la devolviera.
- Perdona chico, pero creo que estás equivocado. La única persona más cercana que conozco que se llame MÓNICA es mi nieta, pero falleció hace 2 años en un accidente de tráfico.-le dice la mujer.

SERGIO no puede creer lo que ha escuchado, e intenta aclarar el tema:
- Señora, eso es imposible; porque ayer mismo, como ya le he dicho antes, yo estuve con su nieta y le presté mi chaqueta.
La mujer, ya desesperada, le enseña una foto de MÓNICA y le dice:
- ¿Es ésta la chica de ayer?
- Sí, es ella! -dice SERGIO asombrado.
- Pues si aún no estas convencido, ves al cementerio y encontrarás la lápida y tumba de mi querida nieta.

SERGIO, seguro de que todo se trata de una broma pesada le hace caso y coge el camino hacia el cementerio. Y cuando llega no puede creer lo que ven sus ojos: la lápida de MÓNICA... y encima...SU CHAQUETA!

Cita con un Fantasma. Jordi Guasch. Prohibida la copia de la imagen.
Ilustración: Jordi Guasch [ contactar ]
Si quieres ver todas sus ilustraciones pincha aquí

 



Katrina (Chile)
Kruela: Esta historia (CITA CON EL FANTASMA), es verídica, paso acá en Chile y fue llevada a la pantalla en el Programa Chileno de cosas Paranormales que conduce el periodista Carlos Pinto en el Canal Nacional TVN, llamado "EL DIA MENOS PENSADO", tengo entendido que ese programa a llegado a otros países de habla hispana por Cable, aquí vi ese capítulo y otros en el Canal Infinito. Lo mismo con la historia de Fantasmas "Amiga del mas allá" ( 144 ), También salió en dicho programa, y la historia la contaba una Señora de avanzada edad, así que la tal Fanny que la envió se adjudicó la historia. Ambas son muy buenas pero muy conocidas acá en Chile.

Ovi Hernández
Esa historia es muy conocida por el norte de México, hasta hay una canción con Ramón Ayala (el rey del acordeón). Creo que sucedió en Sinaloa pero algo diferente. Tengo la canción. Su amigo, Ovi Hernandez.

Guillermo Loredo
Oye Ovi, y ¿cómo se llama la canción?

Sekhmet
Buenísima leyenda y sí, aquí en México es muy sonada, mi voto indiscutible, saludos y besitos para todos.

Letty F. Gutiérrez (Laredo, Texas. EEUU)

¡Hola!
Esta historia de la chica de la chaqueta se vivió hace años aquí en Laredo, Texas, en USA, pero sucedió en un baile donde el joven quedó prendado de ella y le presta su saco del traje y exactamente como narra el muchacho va a buscarla y le dicen que ha muerto. Decide ir al panteón y ahí está su saco. A la fecha el joven se encuentra recluído en un manicomio.
Saludos a todos desde Texas
 

NOTA DE ROBER: SI QUIERES ENVIAR HISTORIA MANDANOS POR COMENTARIOS Y LA PONEMOS CHAOO
PRONTO ABRA MAS

 
  Hoy habia 6 visitantes (8 clics a subpáginas) ¡Aqui en esta página!  
 
Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis